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jueves, 19 de noviembre de 2020

Conversando con Alex Blum Runde - 18 noviembre 2020

Alex es hijo de un querido compañero de curso de mi colegio The Grange, Roberto Blum.
Me enteré que calificaba para chilean tekie, primero por su padre, pero recientemente por otro amigo, cercano a la familia de Roberto, Andrés Hofmann. 
Le escuché hacer algunos comentarios de Alex y dije, ya, intentaré entrevistarlo para este blog.

Fue fácil; acogió altiro.
Y hoy, miércoles 18 de noviembre, sostuvimos una grata conversación por Zoom, de hora y cuarto. Él estaba en Nueva York y yo en Santiago de Chile.

Alex tiene 33 años, es casado con Mackenzie Kay, Consultora en Comunicaciones y Relaciones Públicas, con quien acaban de tener su primera hija, Clara. 
Alex vive hace 14 años en EEUU. Nació y fue al colegio The Grange en Santiago, hasta cuarto medio. De ahí migró al estado de Carolina del Norte, a la universidad de Duke, a estudiar Ciencias Políticas.

Hizo la carrera de cuatro años, pero en una practica en un Think Tank descubrió que las Ciencias Políticas, no era lo suyo; guau.
Se fue a un soñado San Francisco, donde después de algunos trabajos, emprendió vendiendo salchichas en la calle, con un socio. Fue desgastante y un desastre financiero; un fracaso.

Finalmente se empleó en un Headhunter, como entrevistador de candidatos a empleos. Adquirió destreza en este oficio y se ganó la simpatía de los jefes. Cuando la empresa decidió abrir oficinas en Nueva York pidió ir a hacerse cargo. Y partió.
Se transformó en un experto entrevistador y reclutador.

Tengo que contar una historia previa aquí. Cuando estaba en el colegio, un libro, produjo en él un fuerte impacto. En este libro, un personaje del libro, empieza a conversar con el autor del libro. Él no podía creerlo; esto no está bien ! Esta experiencia, no solo le rompió los esquemas, sino que se transformó en un atento observador, de oreja abierta, como dice él.

Esto hace que este joven, atento y agudo observador y escuchador, detecte anomalías en la realidad de Nueva York. Se da cuenta que hay problemas en los restaurantes en las entrega a domicilio. Cada restaurante tenía 6 a 7 bicicleteros contratados, para los despachos. Lo que era un despilfarro. Aparte de que volvían de sus destinos sin carga y podían perderse en la ciudad, sin posibilidad de control de sus empleadores.

Y viene el chispazo, el eureka; vio la oportunidad y de inmediato se puso en acción. 
Se pone a diseñar y a reclutar a quien sería su socio tecnológico. En ese tiempo ya había renunciado a su empleador Headhunter y operaba prestando él mismo servicio en forma independiente.
Recuerda que entrevistó a muchos dueños de restaurantes, indagando de sus circunstancias en el tema de los despachos.

Hoy, con la empresa Relay andando en tres ciudades, Nueva York primero, hace 6 años, Filadelfia desde hace un año y Washington desde 6 meses, tienen 5.000 ciclistas que operan como Contratistas independientes, con contratos por hora.
No solo los restaurantes están felices con el servicio, con ahorros significativos, sino que los ciclistas los aman, pues están sacando en promedio US$ 60.000 al año, incluidas las propinas. Es una cifra nada de mala.

El futuro se ve promisorio para este joven. Con solo tres ciudades y el éxito que han tenido, pueden crecer enormemente y alcanzar una gloria mas alta de la que ya tienen. Estamos en un mercado competitivo; no cuesta mucho que otro se meta en este nicho y les cause estragos. 
Están trabajando con pasión y entusiasmo y lo veo muy contento.
Le pregunté cuanto vale la empresa y me dijo que no lo sabía, pues el valor se pone cuando dos personas se ponen de acuerdo. 
Le pregunté si le ofrecieran MMUS$ 150 si la soltaría ? Y me dijo que lo pensaría.

Bueno, si la llegara a vender, tiene no uno, varios proyectos que le gustaría echar a andar.
Está muy interesante el mundo para estos jóvenes, sin duda.

miércoles, 10 de junio de 2020

Conversación con Cristian Fiedler - 2 y 3 de junio 2020

Cristian vive en Santiago de Chile, tiene 60 años, casado con cuatro hijos y cuatro nietos.
En la actualidad trabaja en la empresa Trends, de su amigo y ex jefe Rodrigo Silva, asistiendo, entre otras, la aplicación Swift que esta empresa representa en Chile y Bolivia, que apoya la mensajería internacional de valores.

La parte más interesante de Cristian es que además, da soporte a clientes de una empresa americana, llamada Dimensional Insight, a su producto Diver Platform, de inteligencia de negocios. Esto a nivel internacional. Por este tema, a veces le toca viajar a distintas partes del mundo.

Conoció esta herramienta cuando trabajó en Sony, como subgerente de Informática, donde tuvo que desarrollar un dashboard, para entregar informes de gestión para la alta gerencia. No les fue fácil y era para máquinas MAC, con un resultado que no fue de lo más elegante.
Después de un tiempo se cruzaron con el producto Cross Target, que les permitió desarrollar el mismo dashboard con suma facilidad y una estética notable. Le gustó tanto el producto, que lo estudió en profundidad. Este producto después se llamaría Diver y en la actualidad Diver Platform.
De esa ocasión que se conoce con los dueños de esa empresa en Alemania, lo que fue factor clave para más tarde irse a trabajar para ellos a Alemania y hoy estar en la función que ocupa a nivel internacional, con ese producto desde Chile.

Cristian estudió en el colegio Alemán de Valparaíso, luego en la Escuela Experimental de la universidad Santa María de Viña, para finalmente ingresar a estudiar Ingeniería de Sistemas de Información, en esa misma universidad.
Se casa a los 22 años con Giovanna Porzio, que en ese tiempo estudiaba Diseño y tiene con ella cuatro hijos, hoy desplegados por el mundo.
La mayor, Tanya, profesora, tiene a sus 4 nietos y vive en Suiza. Valentina, dedicada a deportes extremos, se mueve entre las Canarias y Suiza. Sofía, psicóloga, vive en Santiago. Y Benjamín, que estudió Administración Hotelera, en Suiza también.

Cristian, la verdad, podría haber estudiado cualquier cosa, o incluso ser comerciante, si ese hubiera sido el giro de su padre. Optó por Informática, porque le gustó el ruido de las máquinas cuando visitó ese departamento en la universidad, y por que ahí estaba un amigo suyo, de apellido Gildemeister.
Siempre fue un buen alumno y sacó excelente resultado en la PAA.

Se cambió muchas veces de empleador. Siempre fue buscando mejores condiciones en cuanto a poder hacer lo que quería, libertad, y también por los términos económicos.

Partió en el Banco Edwards, primero como Programador y termina como Ingeniero de Sistemas.
De ahí pasó al Banco Español, al área de Ingeniería de Sistemas, donde lidió fuertemente con el tema de Comunicaciones.
De ahí pasa brevemente a Banlider, donde toma cursos de POS, que le servirán más adelante.
Luego pasa a trabajar a Emergencia 24 Inc., empresa norteamericana, dedicada al monitoreo de alarmas, que tenía en Chile un centro de desarrollo de software, lo que los constituye en la, o una de las, primeras empresas chilenas en exportar software.
Luego retorna al Banco Edwards, esta vez directo al área de Ingeniería de Sistemas, donde es parte de un importante proyecto de comunicaciones, que llamaron Tubo, que era muy similar a lo que sería después el MQ Series de IBM. Me dice que ese proyecto fue un éxito rotundo, que si hubiera tenido habilidades comerciales, su camino podría haber sido otro.

De ahí pasa a Sony donde hará récord con casi 10 años de permanencia. Sus jefes fueron gerentes generales de nacionalidad japonesa. Tuvo muy buena relación con los dos primeros, pero el tercero y su forma de ser confrontacional, lo llevaron a renunciar.

De ahí pasa a Infonet E-Money, otra empresa de comunicaciones, donde participó en los desarrollos necesarios para constituirse como un ISP.
Termina metido en el tema de inteligencia de negocios, eludiendo un pedido que le hacen de meterse en el tema de seguridad.
Luego pasa a la empresa Pointpay Interntional Chile, especialistas en máquinas POS. donde será Jefe Técnico a cargo de las áreas de Programación y Servicio Técnico.
Pasa a continuación dos años en Transbank, a cargo de Producción. Esa área fue transferida a HP en la modalidad outsourcing, lo que le significó pasar de gobernar a 7 personas en Transbank, a gobernar 71 personas de HP, donde hacían esa pega para tres empresas. Renunció agotado exhausto.

En un momento anterior, participó en la creación de la empresa Soluciones, junto a Julio Acuña y Hugo Román. Desiste de seguir y le pasa su lugar al actual tercer socio de la empresa Pedro Candel. Saliendo de Transbank, golpea la puerta en Soluciones y le hacen espacio, donde trabajará atendiendo clientes de la empresa.

Finalmente lo contratan el Alemania, la misma empresa del software de inteligencia de negocios Diver Platform, Dimensional Insight, para hacerse cargo de los clientes europeos germano parlantes.
Allá estará unos 5 años, para luego venirse a Chile, con una relación permanente con esa empresa en forma remota.

Cristian es una persona que le gusta meter las manos en el barro, estar en la cosa creativa, de diseño y construcción. Además no tiene problemas de llamar a cualquier persona que conozca o no, que sepa de lo que está viendo, para hacerle preguntas técnicas. Por eso me dice, que saca rápidamente adelante las cosas.

Hay una bonita anécdota de este último tiempo. Hay un problema con un software de seguridad Safewatch en el Banco de Chile; un problema serio. Su jefe de Trends le pide que se vaya a Europa a entrenarse en el producto. Se va por 15 días, vuelve, se mete en la configuración del producto, cambia un 4 por un 3 en un campo y el problema se resuelve.

Bueno, Cristian Fiedler, es un excepcional gasfiter de la tecnología, versátil, hábil, que se mete a fondo, de carácter y sin miedo ni problemas en pedir ayuda. Le ha ido bien. Y le ha ido bien en la vida. Fue un gusto para mi conocerlo más en profundidad.

jueves, 8 de agosto de 2019

Conversación con Martín Cruz - 8 agosto 2019

Nos reunimos a desayunar, en el Tavelli del Drugstore en Providencia. Él se comió un desayuno con paila de huevos con champiñones, aparte de jugo, tostadas y café, mientras yo lo miraba en mi día de ayuno.
Me enteré de él pues es muy amigo de mi hijo Diego, con el que se conocieron en Melbourne Australia, cuando ambos viajaban por separado.
Una cosa me llamó la atención: después de estar más de un año fuera, venía decidido a no emplearse, sino que a emprender.

Martín Cruz
La verdad es que era un emprendedor desde los 11 años, en que vendía manjarcitos en su colegio, el San Ignacio de Pocuro.
Estudia Ingeniera Civil Industrial en la universidad Católica y su primer trabajo es en una pequeña empresa de innovación tecnológica. Ahí usaban visión artificial e inteligencia artificial y lograban cuantificar la cantidad de cobre en muestras de metal blanco, de altas temperaturas.

Bueno, después de su viaje a Australia, donde estuvo más de un año, vuelve y con un amigo viven en un departamento de la mamá del amigo y empieza a buscar como hacer algo que les permita parar la olla, como me dijo.
La primera idea fue un completo fracaso. Estuvieron abocados a ella durante seis meses y consistía en desarrollar un carné o pasaporte, que le daba derecho a los turistas a obtener descuentos, aparte de llevarlos a los negocios reclutados. Debían instalar en cada negocio un software, conectado con el resto de los negocios asociados. Bueno, no funcionó; no vendieron nada.

Mal lo deben haber pasado en ese tiempo.
Un día, conversando con un amigo, le contó de esta idea que una vez usó en un trabajo que tuvo que hacer en un ramo, de diseñar una aplicación que permitiera tomar número de las filas de los consultorios y hospitales, en forma remota, y así eludir las tradicionales largas colas.
Toman esa idea y la usan para optar a Fondos Corfo, del capítulo Smart Cities.
Y se lo ganan; MM$ 23. Por ese hecho crean la empresa oficialmente y parten diseñando y desarrollando, contratando para esto a un compañero de universidad, Fernando González y su gente.

Me aclara Martín, que ellos son traductores, de las necesidades, de los dolores que existen en el sistema de salud y no son tekies, propiamente tal; ambos son Ingenieros Civiles Industriales con mención Ambiental. Y esa es su principal gracia: traducen las necesidades de gerentes que estudian lo mismo que ellos en modelos y plataformas co-desarrolladas con sus ahora empleados tekies.
Bueno, para mi caen dentro de este capítulo de chilean tekies, porque lideran, inventan y participan en el diseño de esta y otras iniciativas.
Esta aplicación, que demoraron seis meses en desarrollarla y luego empezar a instalarla y dejarla operando, se llama Sáltala (salta la fila, es la idea).
Me entero conversando con Martín, que los viejitos, enfermos, deben ir todos los meses, por ejemplo al hospital Sótero del Río, y obtener en la farmacia del hospital, sus remedios, para la diabetes o la hipertensión, para lo cual deben hacer una cola de entre 3 y 4 horas. Esto es tanto para acceder a la farmacia del hospital, como a la toma de muestras o imagenología.
Yo no podía creerlo.

pantallazo de la aplicación en el celular
Martín, que más que nada es un comercial en este negocio, se ha terminado haciendo amigo de los directores de los hospitales, a quienes ha tenido que convencer de las bondades de su App y su prestación. Un hospital puede adquirir este servicio que cuesta entre 12-20 UF por tótem instalado.
El sistema funciona con un tótem y la app móvil, que hacen solicitudes al mismo servidor en Amazon: si es que una persona pide el número 5 desde el tótem, luego desde la app se puede pedir el número 6 y el tótem entregará el número 7 en el hospital.

Otra de las pegas de esta empresa de servicios es hablarle a las personas de las colas, para que se cambien a esta nueva forma de operar. Y no ha sido tan fácil.
Me cuenta Martín que en el Sotero del Río, el 30% de las prestaciones se atienden usando la App de ellos, el resto lo hace por el tótem. Y la gente ahora espera sentada, y no de pie, como sigue siendo para tantos.

Bueno, están rompiendo con esta aplicación, que está penetrando bien. Y les ha dado pie para montar un negocio mucho más grande que lo que esta aplicación les puede dar, solo intruseando, conversando, al interior de hospitales. A esta altura diría yo, son expertos en sistema de salud y sus problemáticas.
Ojo está aplicación, sáltala, está impactando los índices de ausentismo escolar y ausentismo
laboral, del país, pues las esperas de largas horas impedía por ejemplo a las madres poder
llevar a sus niños al colegio temprano y también permite que los empleados puedan
ausentarse menos tiempo de sus puestos de trabajo pues ahora pueden planificarse.

Para ilustrar la cobertura que están adquiriendo, te listo otros servicios que está desarrollando y ofreciendo:

  • Pabellón digital. Gestión digital de los pabellones, no solo para efectos de reservarlos para una operación, sino de todas las tareas que cada intervención va requiriendo. Y el director del hospital, por ejemplo, puede ver en su celular, como todo está funcionando. Con importante impacto en las listas de espera para ser operado, por las mayores eficiencias logradas.
  • Cascada BI, que son reportes de gestión hospitalaria, en tiempo real.
  • Digitalización de los presupuestos médicos; este es un tema más bien de salud privada; los presupuestos se generan digitalmente, con alto impacto en la velocidad de las atenciones de clientes y después pueden ser auditables.
  • Cotizaciones de prestaciones online, con la posibilidad de hacer comparación de precios entre instituciones; tienen un piloto para los temas de partos y cesarias funcionando.
Aparte, tienen un giro de desarrollos de aplicaciones a la medida. Este les está generando en este momento el 40% de sus ingresos.
Ejemplos de ellos son: 

  • Clase media protegida (link); esta es una promesa de la campaña del presidente Piñera. Este es un servicio de alto impacto social, para el que los contrató el Ministerio de Desarrollo Social. Este año por este ítem tendrán ingresos de unos MM$ 250,-
  • Arbotag (link); en que fichan todos los árboles de la comuna, con un chip NFC; esto permite pasar la información de cada árbol a un sistema que controla las tareas de mantención de los árboles, por parte de las Municipalidades.
Estos gallos la llevan. Están actuando en el sistema de salud, con aplicaciones de alto impacto.
Son tres socios. Alejandro Yung, que empezó con él y ahora entró Alvaro de la Barra, a hacerse cargo de la gestión con las Clínicas del sector privado. Los tres de la misma carrera y universidad; por eso hay que ir a la universidad: para hacer redes generadores de iniciativas como esta.
Y han crecido a 23 colaboradores, con oficina en una casa de Pedro de Valdivia norte.

Yo quedé prendido con este joven emprendedor, que exuda entusiasmo y buena onda, claramente apasionado por lo que están haciendo, con lo que logra darle de lleno a su razón de vida, que es solucionar problemas grandes, que tengan impacto.

miércoles, 6 de febrero de 2019

Conversación con Ricardo Jara - 5 febrero 2019

Nos reunimos en las oficinas de Continuum, en el piso 7 de Bustamante 24. Era un día muy caluroso de este verano, por lo que tomamos una botella bien helada de bebida del refrigerador y nos fuimos a conversar a puertas cerradas.

Ricardo Jara Alvarez, de 43 años, estudió Informática en alguna universidad y hoy es parte del equipo de la destacada empresa de desarrollo de software, Continuum. Si bien no le gusta mencionarlo, es el gerente general.

Ricardo Jara
Poco dado a exhibir títulos ni universidades, poniendo el eje de la identidad que quieren construir, en el resultado del trabajo que realizan. Así lo conocí desde un trabajo que realizaba para Corfo el año 2016/2017, donde me tocó entrevistar a todos los proveedores. Terminé entrevistándolo especialmente para mi blog.
Hijo único de una familia microempresaria localizada en el barrio Bellavista de Santiago. Se forma al alero de un padre independiente, sin las debilidades de la gente apatronada, resulta un muchacho que en los últimos años de colegio, se rebeló más bien, contra toda cosa que él considerara podría mejorarse. Por eso los compañeros lo llamaban el abogado del curso.
En una ocasión llegó corriendo a la rectoría, arrancando de un profesor que quería pegarle, porque según él la intervención de este muchacho, cuestionaba como él enseñaba, atreviendose de decirle cómo hacerlo mejor.
Hijo único, sus mejores amigos fueron a finales de los 80 un Atari y al inicio de los 90 un PC 386 DX2.

En sus primeros trabajos como computin programador, se va dando cuenta que siempre había personas mejores que él. Eran buenos técnicos pero había algo que ellos no manejaban, la habilidad de comunicar, escuchar y lo mas importante para él, empatizar con los demás. Un día le pide a su jefe hacer otras cosas, como interactuar con clientes. Eso le abrió la puerta a un nuevo mundo.
Un día el jefe le pide dictar un taller de una herramienta de software IBM de la que no sabía nada. El taller duraba 5 días y tenía el fin de semana para prepararse.

Salva los primeros dos días del taller, pero terminado el segundo, prefiere renunciar al trabajo, agotado. El ex jefe le ofrece seguir dictando el curso, con la libertad de hacer lo que quisiera por lo que continuo, hizo lo que quiso en el resto del taller, que básicamente consistió en enseñarles a pensar y resultó ser el mejor profesor evaluado del periodo.

Ricardo con sus socios iniciaron la empresa el año 2008, después de 8 años en trabajos previos donde dice, todo este tiempo equivale a un MBA sobre "cómo no se deben hacer las cosas".
Han tenido éxito y me consta que son una empresa destacada en el mercado.
Son 22 profesionales en Santiago, 12 en Perú y Jorge (socio también), en EEUU.

Ricardo no es un tekie propiamente tal; pero es una persona capaz de articular tekies, impulsando, facilitando, lo más importante, la cultura, el traspaso de conocimiento, el realizar trabajos personalizados, compenetrándose muy bien en las necesidades del cliente, como verdaderos sastres a la medida y cultivando la empatía, no solo con el cliente, sino con los usuarios de sus clientes.

Ricardo, es una persona alegre, cordial, cercano, sumamente relacional. Participa en muchas instancias de colaboración, con otras empresas, universidades y agrupaciones de diverso tipo. Me sorprendieron en él su fuerte espíritu solidario, de bajo instinto competitivo, enfocado en la calidad y el desarrollo personal y profesional de la gente que trabaja con él.

Un agrado de persona, que ha hecho importantes cosas en la vida que lleva.

De momento está al debe solo con el tema familiar, pero sabe que el tiempo es su aliado para lograr el bienestar.

Para más antecedentes, esta entrevista que le hizo la Jo Villanueva, hace muy poco tiempo.

jueves, 6 de diciembre de 2018

Conversación con Ignacio Abarca - 29 de noviembre 2018

Nos reunimos en el Bravíssimo de Hernando de Aguirre con Tobalaba.

Yo le había propuesta esta entrevista, en un evento de tecnología en la Casa Central de la UC, donde lo escuché hablar y me llamó la atención.

Ignacio Abarca tiene 32 años, es Ingeniero Eléctrico de la Universidad de Chile y es CTO de TeleDX.

Ignacio conoció a José Tomás Arenas en la carrera de Ingeniería Eléctrica. El 2013 José Tomás junto Mariano Pola, quien fue su profesor guía, y el Dr. Rodrigo Donoso, quien es Oftalmólogo, crean TeleDx empresa a la cual Ignacio se incorporaría el 2015 como CTO. Antes de integrarse a TeleDx trabajó en un par de empresas en la industria de las telecomunicaciones.


El tema del que se han hecho cargo (en TeleDx), es la gran cantidad de personas con diabetes en distintos grados de avance, que empiezan a tener daños en la retina, que si no controlan una vez al año, los podría dejar ciegos. Se llama retinopatía diabética.

Han desarrollado una tecnología, que es capaz de filtrar casos, a partir de una imagen de la retina, e indicar si el caso requiere ser revisado por un oftalmólogo, ya sea de manera presencial o remota.

Es en definitiva, un filtro de detección temprana. Es tal el impacto que está teniendo, qué el producto lo compró el Ministerio de Salud y lo está usando en unos 120 centros de atención primaria de Chile, realizando unos 1.000 exámenes diarios.

La tecnología que usan para esto son las redes neuronales, que es parte importante de la Inteligencia Artificial.

Ignacio
Desde el año 2014 esta tecnología evolucionó a lo que conocemos como Deep Learning ya que gracias al aumento en la capacidad de procesamiento se han podido usar redes neuronales con más capas, ya que en rigor lo que pasó el 2014 es que le agregaron más capas a las redes neuronales convolucionales que son un modelo de fines de los 80.

Me cuenta Ignacio qué la visión que tienen, es funcionar como una herramienta que permite cubrir la brecha que hoy día no se está cubriendo y aumentar la cobertura del examen lo cual va a permitir identificar una gran cantidad de casos que hoy día no se están detectando, lo cual muy por el contrario de reemplazar a los profesionales, debería aumentar la demanda por horas especializadas de éstos para tratar a pacientes que hoy día requieren tratamiento pero que no están siendo detectados. En su opinión personal, este es un buen ejemplo donde todos se ven beneficiados por el uso de Inteligencia Artificial ya que se aumenta la cobertura de un examen y los oftalmólogos pueden dedicarse a tareas más especializadas donde generan más valor.

Mientras avanzan con su producto Dart, para la retinopatía diabética, empiezan a incursionar en otros dos frentes: las neumonías a partir de radiografías de tórax y las mamografías.

Ignacio es un apasionado de todos estos temas tecnológicos y como Ingeniero Eléctrico menciona lo importante que es hoy en día que los trabajos sean multidisciplinarios y en este campo por ejemplo lo importante que es que carreras como Ingeniería Eléctrica, Ingeniería en Computación y Medicina colaboren, situación que no siempre se daba en las universidades, como fue su caso, pero que hoy en día está cambiando.

jueves, 8 de noviembre de 2018

Conversación con Sergio Nouvel - 5 de noviembre 2018

Él está situado en Lima y no viene a Santiago hasta febrero, así que optamos por conversar a través de Skype, medio que resultó impecable. El único problema es que en un momento llegaron mis nietos de Puerto Varas e inundaron la pieza, por lo que después de saludarme y a Sergio, nos dejaron continuar con nuestra charla.

Sergio es nacido y criado en Santiago de Chile, el mayor de tres hermanos, hijos de un matrimonio, cuyo padre se dedica en la actualidad al coaching y la consultoría.
Tiene 34 años y estudió Diseño gráfico en la universidad de Chile.

Sergio
Trabaja desde hace años en Continuum, empresa de tecnología, con sede en Santiago.
Llevaba un blog y cruzó señales con otro blog, de una peruana, de nombre María José Osorio. Este se llama Soltera codiciada.
María José es guionista y creadora de contenido; en ese tiempo era residente en Arequipa.

Se empezaron a comunicar vía twitter y sin verse aún, él dice que se enamoró de ella. Decidió partir a verla y allá la cosa agarró viento de cola, al punto que hoy están casados y viven juntos en Lima, ciudad neutral, como dice Sergio.
Otra cosa: en el intertanto el blog evolucionó a película en Netflix.

Desde allá se comunicó con sus colegas de Continuum, informándoles que se quedaría allá, pero como seguía enamorado también de Continuum, por qué no creaban una subsidiaria peruana.
Y eso hicieron.
De hecho, me contó que ese día que conversábamos, se cumplían cuatro años de la subsidiaria de Continuum en Perú.

Tiene un socio en Perú, Sebastián, que vivió una circunstancia de enamoramiento de peruana, muy parecido al de él; pero esa es otra historia.

Nos embarcamos en una conversación respecto de la transformación que están sufriendo las empresas, que se ven forzadas a pasar de una interpretación mecanicista de lo que son, a una más, no se si organísmica, o de red de relaciones más planas, con personas a todos los niveles más empoderadas, con mucho más confianza distribuida.

Yo le pregunto cómo migra de su oficio de diseñador gráfico a estar en lo que está hoy día.
Está completamente prendido con su interpretación del diseño, como una mirada preñada de la dimensión humana, que mira los productos, los servicios, incluso las organizaciones, como sistemas complejos de interacciones, llenas de la presencia humana, comunicada y soportada por tecnología.

Esto ha llegado a tal punto, que han establecido una alianza con una universidad peruana, la UTEC, una nueva universidad sin fines de lucro, donde han diseñado y están dictando cursos de:

  • Experiencia usuario
  • Diseño de servicios
  • Transformación digital,

todos temas relacionados con sus temáticas.

con María José
Clave en todo esto son las metodologías ágiles, tema del que cada día me convenzo más, tenemos todos qué dedicar algún tiempo a entender al menos de qué se trata.
Lo que voy entendiendo es que cambian completamente cómo interactúan todos los actores participantes de un proyecto. Todo se horizontaliza, las responsabilidad se comparten y no hay jefes ?
Y lo otro, que rompe completamente con Taylor.
Me recomienda leer el Manifiesto ágil.

Sergio me cuenta que sus clientes varían, desde bancos a empresas de servicios, en que cada vez crece más y más el ámbito en que intervienen, tomando en sus manos la complejidad implícita en todo sistema donde actúan profusamente los seres humanos.

Aparte, dedican tiempo a sus propios startups, siendo el que está tomando cada vez más su dedicación completa, el llamado Get-on-board.
Se trata de una plataforma, que ya tiene 78.000 profesionales del mundo de las tecnologías, que andan buscando emplearse.
Los conectan con empresas que contratan talentos.
Get-on-board partió hace 7 años y ya está operando en varios países. Lo llevan en la actualidad cinco personas, dos de ellas a tiempo completo; el resto part-time.

Sergio es un apasionado de todos estos temas. Está entretenido y se siente afortunado.
Siente que está en una revolución comprometida en serio con entregar un bien para la sociedad y no depredarla como hacen muchos empresarios actuales.

Termina diciéndome que Perú es acogedor con los chilenos.

lunes, 6 de agosto de 2018

Conversación con David Pozo Viguera - 31 de julio 2018

Nos reunimos en el Tavelli de Providencia; tipo 11 de la mañana. Me paré como a las 13:30

Nos conocemos bien con David. Pero me enteré de muchas más cosas que no sabía de él, en esta conversación.

Casado, dos hijos; él con 59 años. Vive solo ahora, que está separado. Su hija Valeria es Socióloga y su hijo Hugo, Ingeniero en Control de Gestión como buenos Millenials, ella se dedicó a proyectos de desarrollo de software y ahora a Terapias de Medicinas Alternativas, él es guía explorador del Hotel Explora en las Torres del Paine.

David
Su abuelo era Mr Soto, de la Anaconda Cooper Company, en Chuquicamata. En ese tiempo los gringos que trabajaban en Chile no pretendían aprender español, así que tenían a este tipo de personas, para la interfaz con los chilenos. Mi abuelo sabía inglés y eso le dio acceso a casa de ejecutivo, para la cercanía que requería el contacto con los gringos.

Su padre fue maestro fundidor de Huachipato, filial de la CAP. Había cursado estudios hasta cuarto de humanidades, por lo que su carrera la hizo solo, tomando cursos por correspondencia. Murió cuando David tenía 23 años.
Su madre, dueña de casa.

David es el mayor de tres hermanos. Una hermana que lo sigue y un hermano trece años menor que él. Tiene otro hermano mayor que él, que traía su padre de antes.
Se cría en Chiguayante, adonde asiste a su Liceo. En este colegio, su profesor de Física, que estudiaba Matemáticas en la universidad, les dijo que mejor estudiaran Informática, pues ya había suficientes Ingenieros Matemáticos.

Bueno, David entró a Ingeniería en Matemáticas de la Universidad de Concepción, pero cuando en el primer año, en una prueba le piden demostrar la existencia del cero, decide que aquello no era para él. Vuelve a dar la PAA y se cambia a Informática, donde le reconocen la mayoría de los ramos que había tomado.

No tenía un pasado en Informática, por lo que cuando tiene que lidiar con diseñar diagramas de flujos de los que serán luego programas computacionales, le cuesta mucho. Recuerda que en una ocasión, se pasó dos días y dos noches, tratando de entender esas cosas. Finalmente lo logró y a partir de esta situación, nunca más tuvo dificultades para enfrentar un desarrollo, de diagramas de flujo primero, diseño algoritmos y programación posteriormente.
Esta intensidad y obstinación para ir a las materias, más su habilidad para hacer amigos y recurrir después a ellos pidiendo ayuda, le permitió recorrer la carrera sin problemas.
Aparte de que jugó mucho a la pelota, destacando como arquero.

Lo que también pasó, es que se fue encantando con las materias y las posibilidades que estas permitían de hacer cosas; y se fue apasionando por la computación.

Estando en la universidad empieza, por una parte, a trabajar haciendo ayudantías, de investigación, con profesores que lo metían en proyectos que tenían con la industria local.
Recuerda haber hecho un proyecto para la radio de la universidad, para procesar las encuestas de radio audiencias. Trabajó con un IBM 1620, uno de dos que habían en Chile en esa época, Estas máquinas no tenían Sistema Operativo, trabajaban con Monitor Secuenciador de Jobs, con tarjetas perforadas.
Más tarde trabajará con un Burroughs 1860 con sistema operativo multiusuario. Para un proyecto de Petrox, haciendo un sistema para el movimiento de distintos tipos de petróleo por las tuberías entre estanques.
Programaba en Fortran y en IBM 370, ya con sistemas multiusuarios

Lo que más le gusta hasta el día de hoy, es programar. Lo último que hizo fue en .NET. Se maneja bien también en Java Script y PHP.

Su memoria, que la terminó haciendo en la UC de Santiago, en Cecico, la hizo programando en Assembler, rutinas de optimización del uso del disco del sistema operativo de máquinas Digital. Quien lo acogió en esta casa de estudios fue Oscar Mímica. Ahí conoció también a personas con las que después trabajaría en la empresa Orden, aún no creada, como Carlos Lauterbach, de  Giovanni Dezerega y Juan Bennett.
Se tituló de Ingeniero en Ejecución Computación e Informática, en la Universidad de Concepción.
En esa etapa aprovechó de tomar cursos de compiladores con Lauterbach como profesor.

con su hija Valeria
En Cecico, trabajando en el soporte de usuarios, se hizo cargo del “Editor de Alumnos” que era sistema operativo para alumnos, desarrollado por Lauterbach y De Zerega (Era un subconjunto de operaciones del S.O. que permitían a los alumnos básicamente editar, enviar procesos de comilación y ejecución al batch, evisar resultados e imprimir),  Esto en una máquina Digital KL10, con Sistema Operativo TOPS 10 que atendía a usuarios; muchos usuarios.
Este  “Editor de Alumnos”  fallaba con alguna frecuencia, pues entraba en loops. Siempre los resolvía solo, pero una vez terminó trabajando con Carlos Lauterbach, un problemas más complicado. Ese encuentro muy probablemente fue el que después lo catapultó para irse a trabajar a Orden S.A.

Su primer trabajo propiamente tal fue en Comercial Casado, mientras estudiaba en Concepción (viajaba jueves de noche, volvía domingo de noche), dueña entre otras del Shopping Group, una empresa familiar.
Ahí desarrolló los sistemas de Cobranza de habilitados, el sistema de cuentas corrientes, de Contabilidad, Inventarios, Compras.
Hasta que la empresa un día se quemó entera, con los computadores adentro. Había respaldos, que hacían una vez a la semana y don Pablo Casado se llevaba para la casa. Pero este no quiso continuar.

Tito Gómez lo engancha para trabajar en Orden S.A. donde estará 3 años.
Parte enviado por seis meses a trabajar en un proyecto al Registro Civil, institución a la que Orden le había hecho buena parte de sus sistemas. Participa en el desarrollo de un sistema de Control de proyectos.
De ahí se va a trabajar con Lauterbach en el desarrollo de Dunga, que es un generador de programas. Estaba hecho en Fortran y generaba Cobol.
Tuvo que migrarlo a varias plataformas, después de aprender muy bien cómo estaba hecho por dentro.

De repente le ofrecen una tentadora renta desde el Banco de Concepción y se muda. Cuando llega al banco los que lo habían enganchado, ya no estaban; se habían ido al Banco de Chile. Y para más remate el banco se puso en venta. No quiso seguir ahí.

Circunstancialmente saliendo del Banco un día, se encuentra con Hermann von Borries y le cuenta de su situación. Von Borries lo conocía pues le había revisado su memoria y le había hecho algunas sugerencias.
Lo conecta con Mario Saffirio, Gerente de Software de Sonda, quien lo termina contratando, como Ingeniero de Software para el área de Soporte. Apenas ingresa lo mandan al área de Control Automático, donde estaría un año.
De ahí lo mandan en forma de residente al Banco de Santiago, como Ingeniero de Sistemas de máquinas Digital Vax y Digital Tops10, con el Timesharing / Total Operating System-10. Ahí estará seis meses.
Su mejor momento es cuando lo pasan al área de Investigación y Desarrollo, donde participa en el desarrollo de varios módulos del gran Sistema Transaccional Financiero (STF). Ahí desarrollan, con la ayuda de la empresa Orden, un generador de transacciones esta vez, con un lenguaje de especificación de transacciones, con su compilador.

Se detiene un minuto para hablarme de su querido y brillante profesor Juan de Dios Cáceres, que un día comienza un semestre escribiendo en la pizarra “Add R1, 1”, explicándoles que cuando la computación cambie ese paradigma, tendrán que re construirse completamente la cabeza. Mientras este persista, será todo fácil y dentro de ese mismo contexto.

El éxito que significó el STF para instituciones financieras para Sonda, le significó a David viajar mucho. Su rol era de implementador. Estuvo en Jakarta, Indonesia, en Tailandia, Perú, Venezuela, Colombia. También le tocó presentar STF en Estados Unidos, a las áreas técnicas DIGITAL, dado que el STF era la única solución exitosa para la Banca en las plataformas VAX/VMS
Su mujer empezó a reclamar y David consiguió una alternativa dentro de Sonda, a través de Ricardo Majluf, que significó que se fuera con toda la familia a hacerse cargo de una subsidiaria de Sonda en Uruguay, donde estuvo 7 años.

Habían cerrado un negocio con el Banco Pan de Azúcar en Montevideo. En Chile la aplicación tenía básicamente dos monedas, pero allá el sistema debía ser multimonedas. Hay trabajo que hacer y David se va con un equipo de 14 programadores y desarrollan 13 sistemas bancarios en 9 meses, desde cero porque la base de los productos de Chile no cumplía con la necesidades del mercado Uruguayo.
Terminada esta implementación, David sigue solo intentando expandir la posición de Sonda en ese país sin mucho éxito comercial, hasta que llega Carlos Finat, como gerente general de Coasin  Uruguaya, empresa con la que actúan muy de la mano, que tiene mucho mayores habilidades comerciales.
Recuerda cuando se ganaron Aduanas allá, un gran logro y un gran negocio.

Otro importante logro, fue haber desarrollado un sistema de Comercio Exterior bancario, integrado con el resto del Banco y completamente online. Incluso integrado con el sistema Swift de transacciones de moneda entre países.

Se vuelven a Chile por temas de salud familiares, más allá de su propia familia. Pero no llega a Sonda, sino que sigue a su amigo y colega, con el que había trabajado implementando STF en muchas partes, Carlos Rios, que ha ocupado el cargo de gerente de Informática de Transbank. El llega como subgerente de Desarrollo de Sistemas, cargo que ocupará durante 7 años.

En Transbank, se interioriza con profundidad en el negocio y participa haciendo propuesta, diseñando y hasta programando piezas de software.
Participa en el desarrollo del PAT, de cargos periódicos en tarjetas de crédito. En la implementación del chip de las tarjetas bancarias. Y muchas optimizaciones que se van haciendo necesarias, por los tiempos de respuesta que la economía les va imponiendo.

Cuando vuelve de Uruguay, junto a algunos amigos crean el grupo Checalecalón, de ex alumnos de Informática de la universidad de Concepción y empiezan a reunirse año a año, hasta la fecha.

Finalmente decanta una vieja inquietud de operar en forma independiente. Se dan las condiciones para irse de Transbank en buena forma y se dedica a la consultoría para lo cual crea la empresa Simplyfi.
Tiene como clientes a empresas como Falabella, Walmart, Aramark, Finning, etc.
Aquí despliega su gran habilidad creativa de ideas, con alternativas muchas veces, para diversos escenarios, siempre muy en contacto con las problemáticas del negocio.

El año 2015, lo llama su amigo Guillermo Muñoz, compañero de curso en Informática de la universidad de Concepción, para sumarse al proyecto Escritorio Empresa de Corfo.
Aquí tiene un rol protagónico en el diseño de la solución, en su arquitectura, en la especificación técnica de la licitación y en el motor, que es un diseñador de trámites del Estado.
Mucha dedicación, mucho trasnoche y con el cambio de gobierno, es invitado a irse. Teme que todo lo hecho termine en el tarro de la basura, cosa que lo tiene algo afectado.
Ha vuelto a su empresa Simplyfi. Se encuentra bastante desocupado en la actualidad, dedicando algunas horas al proyecto We are Wof, de unas jóvenes emprendedoras.

En este momento me acuerdo cuando empezamos a conversar y le pregunto en qué estaba y me dice, después de un silencio, “quiero inventar”. O más bien mejorar inventos, precisa. "Me gusta hacer motores".